martes, 28 de febrero de 2017

Día Mundial de las Enfermedades Raras 2017



Un enfermedad rara es aquella que afecta a un pequeño número absoluto de personas o a una proporción reducida de la población. Los diversos países y regiones del mundo tienen definiciones legales diferentes. En Europa, se considera «rara» a una enfermedad que afecta a 1 de cada 2000 personas. En Estados Unidos, se define así a un trastorno o enfermedad que sufren menos de 200.000 personas, mientras que en Japón a la que afecta a menos de 50.000. En Taiwán el criterio es que la prevalencia sea de 1: 10.000 y en Australia la cantidad de afectados debe ser menor que 2000 individuos. En cualquier caso, se trata de porcentajes muy bajos de la población (en Europa, por ejemplo, solo 0,05 %), situación que requiere de esfuerzos especiales unificados y de coordinación internacional para poder combatirla.

En el campo de la ORL se considera Enfermedad Rara la Disfonía Espasmódica motivo por el cual hoy la recordamos.

    La disfonía espasmódica es un trastorno crónico (a largo plazo) de la voz. Se caracteriza por el movimiento involuntario de uno o más músculos de la laringe u órgano de la voz. Los primeros síntomas de disfonía espasmódica se presentan con mayor frecuencia entre las personas de 30 a 50 años de edad. Este trastorno parece afectar con mayor frecuencia a las mujeres que a los hombres. La gravedad de los espasmos de la voz fluctúa. Pueden disminuir durante horas e incluso días.


     En la disfonía espasmódica el movimiento de las cuerdas vocales es tenso y forzado y tiene como resultado una voz que suena quebrada, temblorosa, ronca, tensa o entrecortada. Se dan espasmos o interrupciones vocales, periodos durante los cuales no se produce sonido alguno (afonía), y periodos durante los cuales se produce una voz casi normal.   

    En la actualidad no existe cura para la disfonía espasmódica. Sin embargo, sí existen varias opciones de tratamiento para mejorar la voz.

    Con frecuencia se recomienda varias inyecciones de pequeñas dosis de toxina botulínica (Botox) en una o ambas cuerdas vocales. La toxina botulínica debilita los músculos laríngeos y tiene como resultado una voz más suave y menos forzada, porque las cuerdas vocales se cierran con menos fuerza. Es posible que durante un corto periodo de tiempo después de ser administradas, las inyecciones causen temporalmente voz entrecortada o dificultad al tragar.

     Es importante el apoyo psicológico y la participación en grupos locales para fomentar la autoayuda y la información. 



Fiabilidad de la biopsia del ganglio centinela en el cáncer de cabeza y cuello

     Analizamos un artículo de opinión que apoya la fiabilidad y utilidad de la biopsia del ganglio centinela en N0 de cavidad oral y orofaringe.     
             
Reliability of sentinel lymph node biopsy in head and neck squamous cell carcinoma.
Khaja Khalid M, Nazriya R.
Int J Otorhinolaryngol head Neck Surg 2016; 2(2):105_109

     Artículo  seleccionado y comentado por el Dr. G.Dañino. 


Comentario
   La neoplasia maligna más frecuente en cabeza y cuello es el carcinoma escamoso, siendo la afectación ganglionar el principal factor pronóstico evolutivo.
     Se considera el ganglio centinela como el primer ganglio de una cadena linfática en el que drena un territorio titular determinado y como consecuencia sería el primero en ser colonizado por las células neoplasicas metástasicas de un tumor primario.
   Cada  vez adquiere más relevancia esta técnica, no sólo como valor predictivo, sino como herramienta del alta sensibilidad y eficacia para planificar el tratamiento, teniendo especial relevancia en el tratamiento del cuello N0 en cáncer de cavidad oral y orofaringe.      

Consideraciones Generales
     Es  a partir de 1996 cuando Alex y Krag empiezan a evaluar la utilidad del ganglio centinela en cáncer de cavidad oral y orofaringe, ya utilizado en otras áreas anatómicas.
    En general el riesgo de metástasis  cervicales ocultas  en cN0 se estima entre un 10%-30% existiendo argumentos a favor y en contra de tratamiento electivo. La dificultad estriba en distinguir los pacientes que tienen metástasis no tratadas y no detectadas y que incrementaran su morbilidad y mortalidad. A partir de esta premisa e intentando buscar un equilibrio entre morbilidad gratuita y eficacia empieza a desarrollarse la detección del ganglio centinela. 
    Quizás una de las dificultades para obtener conclusiones en estudios comparativos han sido las diferentes técnicas utilizadas en la detección del nódulo centinela y su diferente sensibilidad.
    De cualquier forma en los próximos años probablemente asistiremos a la normalización de esta técnica dentro de los instrumentos diagnósticos.

       Podéis acceder al artículo libre en el siguiente enlace.